Aunque cada gato tiene su propia personalidad, hay ciertos comportamientos instintivos que tienen en común, sin importar raza, tamaño o edad.
Al tomar la decisión de tener uno o varios gatos podemos enfrentarnos a algunas problemáticas que afectan nuestra convivencia con ellos. Estas pueden ser:
- Que marque los muebles con orina.
- Que no use su arenera.
- Que rasguñe nuestros muebles u otros objetos.
- Que sea agresivo con otros animales o personas.
- Que sea demasiado temeroso con la presencia de desconocidos o de otros animales.
- Que sea muy brusco en el momento de jugar.
Por lo anterior es que en este espacio queremos darles algunos tips para mejorar la convivencia con su(s) gato(s), teniendo en cuenta la manera en que ellos comprenden el mundo. Sin embargo, antes de ello es importante que entendamos que los gatos no comprenden la relación causa-efecto, como lo hacemos nosotros, por lo que pegarle o gritarle no es la mejor opción para reprenderlo, pues ellos no relacionarán este castigo con su actuar, sino lo harán directamente con la persona que lo reprende, es decir, que nuestro gato va a realizar aquello que no nos gusta en nuestra ausencia, ya que somos nosotros quienes gritamos o pegamos, como a su vez, es muy posible que nos comience a tener miedo.
Al momento de estar viviendo cualquiera de las situaciones enlistadas al inicio, lo primero que debemos hacer es llevarlo al veterinario, ya que muchas veces algunas enfermedades o condiciones físicas de nuestro gato pueden hacer que cambie su conducta, por lo que es primordial descartarlas.
En segundo lugar, debemos analizar el entorno, ya que existen algunas características del mismo que pueden determinar el actuar del gato, como por ejemplo, una arena que no se limpia constantemente (no olvidemos que los gatos son muy aseados), o una arenera muy pequeña que no permite la comodidad del gato. Como dato curioso: si tienes más de un gato, y existe algún problema de convivencia entre ellos, ésto puede determinar la conducta de uno o todos los gatos.
Es importante tener en cuenta que, si llega un nuevo gato a nuestro hogar debemos presentarlos de manera adecuada (quizás quieras ver nuestro artículo de "como presentar a un nuevo gato en nuestra familia"), para evitar cambios en el comportamiento, como por ejemplo marcar con orina en distintos lugares de la casa. De igual forma si el nuevo miembro de nuestra familia es un perro, esto puede generar en nuestro gato una actitud agresiva o temerosa.
También debemos saber que al tener gato(s) hay que adecuar la casa de cierta manera para que nuestra mascota no haga daños, como por ejemplo, incluir un rascador o gimnasio, poner algunas repisas que le permitan sentirse seguro.
Como ya mencionamos anteriormente, los castigos físicos o verbales son poco efectivos, por lo que debemos recurrir a aquellas cosas que no le son de agrado a los gatos, bien sea por su olor, sabor, textura o sonido. Por ejemplo:
OLOR: Si deseas evitar el acceso de tu gato a ciertos espacios, el olor a citronela, cítricos o eucalipto lo puede alejar. Puedes ponerlos en un algodón si son esencias, limpiadores o spray que contengan esos aromas.
SONIDO: Usar sonidos que puedan asustar a tu gato, pueden determinar su comportamiento o acercamiento a ciertas superficies. Por ejemplo, haciendo sonar un pito cuando realiza aquello que quieres corregir, tocar una campana o sacudir un tarro lleno de monedas, pueden funcionar.
TEXTURA: Cualquier tipo de papel o superficie adhesiva como cinta, papel aluminio o vinipel no será atractivo para tu gato por lo que finalmente terminará alejándose.
SABOR: Puedes frotar en las superficies que tu gato muerde o rasguña productos cítricos, salsas picantes o pimienta cayena. Con el tiempo el va a asociar ese olor con el objeto, por lo que terminará alejándose.
Por otro lado, si tu gato se torna agresivo o brusco jugando o en otro momento, puedes corregir su actitud ignorándolo, esto lo puedes hacer yéndote a otro cuarto o espacio y dejando de ponerle atención.
Finalmente, para que tu gato se sienta cómodo y feliz, lo cual se verá reflejado en su actitud, procura:
1. Mantener limpia la arenera, que sea de buen tamaño y tenga una buena cantidad.
2. Como ya lo dijimos, incluye un rascador o gimnasio y ubícalo en zonas comunes o en el lugar preferido de tu gato; y dedícale tiempo para jugar.
3. Puedes usar feromonas para reducir el estrés. En la veterinarias las consigues en spray.